Los alemanes que pidan en el Registro Civil cancelar su pertenencia a la Iglesia Católica dejarán de formar parte de la comunidad eclesial, «ya que no se puede salir de la dimensión 'civil' de la Iglesia y definirse al mismo tiempo católico», según un decreto aprobado ayer por la Conferencia Episcopal alemana. El decreto, según informó Radio Vaticana, fue publicado tras ser aprobado por la Santa Sede. La ordenanza, válida sólo para Alemania, según precisó la emisora, ratifica que no se podrá más diferenciar entre «pertenencia civil y pertenencia espiritual» a la Iglesia Católica.
La emisora vaticana recordó que en Alemania está en vigor «un particular sistema jurídico» que incluye entre sus aspectos el de la financiación de las diferentes iglesias, según el cual el fiel de cada comunidad queda inscrito en el registro civil como perteneciente a dicha confesión religiosa.
«Esa inscripción comporta una contribución para el apoyo económico de esa iglesia», agregó Radio Vaticano, que señaló que el decreto entrará en vigor el próximo 24 de septiembre.
En los últimos tiempos numerosos católicos alemanes se dieron de baja como tales en el registro civil para evitar pagar el obligatorio impuesto eclesiástico, aunque seguían participando de los sacramentos, lo que a partir de ahora ya no podrán hacer.
El jesuita Hans Langendoerfer, secretario de la Conferencia Episcopal Alemana, afirmó hoy, según destacó Radio Vaticano, que se trata de una declaración «precisa».
«Quien pida en el Registro Civil cancelar su pertenencia a la Iglesia Católica dejará de formar parte de la comunidad eclesial. No se puede salir de la dimensión 'civil' de la Iglesia y definirse al mismo tiempo católico», dijo Langendoerfer.
El secretario de los prelados alemanes subrayó que esa ha sido siempre la posición de la Conferencia Episcopal y expresó su satisfacción porque a partir de ahora sean los párrocos quienes se ocupen directamente de estos casos de abandono, según establece el decreto.
Langendoerfer contó que quienes quieran ser cancelados del registro civil como católicos recibirán una carta del párroco de su zona y se le invitará a un coloquio con el sacerdote «para entender las causas que le llevan a esa decisión. Obviamente, los sacerdotes intentarán hacerles cambiar de idea y le explicarán de nuevo la participación en la vida de la Iglesia», señaló.
Fuente: Infocatólica, 21 de septiembre de 2012